Tela de chenille
La tela de chenille se fabrica tejiendo una urdimbre de hilos. Se hace con lana, algodón o seda, tiene una textura parecida a la piel y el producto final se parece al terciopelo. Es suave y visualmente atractiva, haciéndola la preferida de los diseñadores de telas. El pelo de la tela no es plano; en cambio, absorbe la luz y la refleja en varios grados. Esto produce un efecto degradé y moteado, como se describe en la terminología textil. Un efecto similar puede encontrarse en la mayoría de los artículos de chenille.
Lana de chenille de algodón
La lana de chenille de 100 por ciento algodón peinado le da una textura suave y afelpada. El chenille de algodón se usa en bufandas, chales, mantas, toallas de baño, paños y ropa. La lana de chenille de algodón puede usarse para tejido de punto o ganchillo en varios puntos , incluyendo punto espuma, entrelazado y con ondas.
Tela de chenille para tapices
El chenille tiene una textura parecida a la lana bereber; es suave, durable y atractivo. Cuando se usa para hacer tapices, el material ofrece una lujosa suavidad de la lana y la moderna practicidad de las fibras de olefina. El chenille es usado desde el siglo XVIII para hacer alfombras, tapices y decoración para paredes. La durabilidad del chenille lo hace una elección preferida por los decoradores de interior.
Tela de chenille para tapizar muebles
Las tela de tapicería de chenille son las preferidas de los diseñadores. Aunque la tela no se hace con fibras iridiscentes, tiene un aspecto natural tornasolado. El diseño del tapizado puede cambiar cuando se mira con diferentes luces y ángulos. La tela de tapicería de chenille muestra un diseño de colores particular cuando le da la luz en cierta dirección, y otro esquema diferente cuando la dirección de la luz cambia. Por ejemplo, la tela de tapicería de chenille en ciertas condiciones de iluminación puede dar un toque vibrante de color a una habitación; un cambio en la iluminación puede revelar un color más sutil.